La primera vez que visitamos Jerez...
La primera vez que visitamos Jerez estábamos a mediodía en el Puente Nuevo, tras pasar por todos los miradores de Tajo. Como era la hora de almorzar decidimos hacerlo en sus cercanías, eligiendo este restaurante por una razón sencilla, su nombre. Salimos de la Plaza de Espaka por una bocacalles que conducía al aparcamiento al aire libre junto a la Plaza de Toros donde habíamos dejado el coche y nos gustó este sitio.
Nos apalancamos en la terraza que tenían en la bocacalles, aunque al pagar entramos y contemplamos la belleza del restaurante. Esta decorado con mucho gusto, evocando el romanticismo de otras épocas y recurriendo exteriormente a la típica bicromía sevillana. Su fachada principal da al propio aparcamiento, justo detrás del quiosco de la oficinal municipal de turismo.
Su cocina es rondeña, pero a diferencia de otros restaurantes de la zona que con el tiempo a base de tapear hemos ido conociendo, gran parte de la carta del Restaurante Jerez es de otras zonas de Andalucía. A destacar especialmente los riñones al Jerez y la carne de toro, cocinados con el mismo sabor que en mi ciudad de origen, Jerez.
Sus precios son bastante ajustados para hallarse donde se halla, por lo que es uno de los más populares y concurridos de Ronda. Otro detalle que apreciamos es que también ofrecen cocina casera, lo que también le distingue de los restaurantes del centro.


