Un gran (y buenísimo) cachopo.
Era la primera vez que acudía al local, aunque ya había pedido la comida a domicilio en varias ocasiones, y no me defraudó: comida buena y abundante a buen precio. El cachopo gigante es descomunal, tanto que comimos tres personas y sobró la mitad. Los escalopes también son grandes y muy bien hechos. La carne de ambos platos era tierna. También pedimos una ensalada mixta que iba en la misma línea: abundante y con una acertada mezcla de ingredientes. Comimos cuatro personas por unos 45€.
Y por poner un pero, las camareras van a gran velocidad y no respetan los turnos de llegada, pero son agradables y hay que tener en cuenta que era domingo y el restaurante estaba que no cabía un alfiler, así que es comprensible y, por lo que se paga, tampoco se puede pedir más.