Excelente lugar para hacer una parada camino del castillo San Jorge y comerse un estupendo arroz con marisco. Platos muy abundantes, buenísimos y muy económico.
Nosotros pedidos ensalada de pulpo, arroz con marisco, una botella de vino verde y todo esto junto con los buñuelos de bacalao que nos pusieron de aperitivo fueron 36 euros.
Es la segunda vez que visito este restaurante y sin duda la próxima vez que viaje a Lisboa volveré.
A unos 50 metros de la Estación de ferrocarril se localiza este sencillo restaurante de comida regional portuguesa. La fachada que alberga el restaurante es una casa antigua, pero su interior está reformado y uno de los comedores se hace muy acogedor y agradable, incluida lo que parecía una chimenea.
La especialidad aparte del bacalhao que por cierto lo preparan divinamente, nos encontramos con variedad de carnes, como el cabrito al horno (sábado), arroz de rape riquísimo, o arroz con gambas, espetada de carne con gambas, costilletas a la brasa con arroz y habas. Etc.
Fui una sola vez a este restaurante con unos amigos y estaba a tope el fin de semana.
Solamente añadir que los platos son abundantes, si podeis evitar los aperitivos os ahorrais unos euros, en Portugal te los ponen directamente sin pedirlos, pero tranquilamente los rechazas, y si viajamos con nenos pueden compartir algún plato de los que pidais, recomiendo también el bacalao, y por supuesto el arroz de marisco, para dos personas pueden comer agusto 3.