Nos ha gustado mucho , fuimos a comer dos dias y todo estaba buenísimo, verduras a la plancha, revuelto de bacalao , calamares a la andaluza , secreto iberico , berengenas rebozadas y rociadas con miel de caña ; y sin olvidar un postre que repetimos: yogurt con frutos secos y miel ( una delicia ), tanto el servicio como la comida fué perfecto, relación calidad precio muy bien, volveriamos a repetir , totalmente recomendable .
A nosotros no nos gusto mucho, fuimos atraídos por la pastella y al final no había. Pedimos couscus de cordero algo seco y sin mucho sabor y un trajín de cordero que era prácticamente el mismo plato que el anterior. Al final nos apetecía mucho el yogur árabe famoso pero tampoco tenían con lo que nuestro gozo en un pozo. Eso si no era caro pero nos decepciono un poco.
Nos dieron una mesa al lado de la puerta en enero, cada vez que se abría nos tocaba levantarnos a cerrarla.
Tardaron mucho en atendernos. Las raciones pequeñas.
