Reto al Volcán Barú
Fue una experiencia nueva y muy diferente, subir a esta montaña, llena de vegetación, con caminos difíciles, aislados del bullicio de la ciudad, con solo el sonido de la naturaleza y los pájaros. Ascender al punto más alto del volcán es una faena difícil pero interesante, porque se envuelve uno en el ambiente natural y el deseo de llegar a la cima alienta por más cansado que uno esté.
Subimos por el lado de Boquete que tiene un sendero más cómodo para subir en un promedio de 5 horas caminando continuamente, cada vez que subíamos la temperatura cambiaba y se enfriaba más el recorrido. A una altura de más de 3,400 metros de altura el frío se sentía más intenso y la presión también por el oxigeno más bajo.