Calle de la Poissonnerie

Ésta es una de las calles que lo harán amar Perpignan. Si la estación de tren no le ha puesto el pelo de punta, si la plaza de Cataluña no le ha hecho levantar las cejas y no ve en el Castillet más que la reliquia de una época pasada, le recomiendo que visite el laberinto que son las calles de Perpignan. Calles serpenteantes, estrechas, torcidas, rodeadas de muros altos...La Perpignan que debe visitar, sin duda. La rue de la Possonnerie es la más particular. A todo lo anterior hay que añadir los colores ocre del Mediterráneo, los tonos rojizos de las casas, y el ambiente de los bares y restaurantes.