Edificio señero del románico montañés
El maestro Covaterio hizo una fabuloso trabajo en cuanto a escultura se refiere, en este Monasterio. Según el Maestro Peridis, en su novela Esperando al Rey, lo cita como lugar de alojamiento del Emperador Alfonso VII y de sus hijos Fernando y Sancho cuando se dedicaban a la caza del oso por estos parajes.