Sinagoga Del Tránsito

La Sinagoga del Tránsito es una de las muestras más importantes del arte hispanojudío. La misma presenta en su interior al Museo Sefardí que cuenta con importantes de vestigios de la cultura judía. Cabe mencionar que la iglesia fue construida entre los años 1355 y 1357, como capilla privada del palacio que, en un gesto de grandilocuencia constructiva, impropia de un hebreo, había ordenado levantar sobre una gran extensión junto al Tajo y cuyos límites llegaban hasta el mismo borde del río.

Ubicada en el barrio judío, no es la única sinagoga que podemos visitar, ya que cerca de ésta tenemos la Sinagoga de Santa María la Blanca. Nosotros elegimos la del Tránsito porque está incluida la entrada al museo Sefardí, en el cual podemos ver cómo era el estilo de vida, religión y costumbres de los judíos en España.

Es un edificio del siglo XIV de estilo mudéjar. En 1492 los reyes Católicos cedieron el edificio a las Órdenes Militares de Calatrava y Alcántara y se convirtió en una iglesia cristiana.

Sinagoga de la que fue la principal judería de la península Ibérica, con una estupenda mezcla de estilos, entre el gótico, el arte islámico y las características típicas de los edificios dedicados al culto judío. Testimonio de la ciudad de las tres culturas.

Algún encargado de la sinagoga ha puesto un tablero simulando un muro para dejar opiniones que no pinta nada, afea el recinto, delante de la fachada interior principal tapando unos arcos que componen la fachada interior principal, recorrer 700 kms para verla y encontrarte con esta monigotada es realmente irritante. Evité por todos los medios sacar una foto a semejante despropósito, lo siento.

Museo y sinagoga en su conjunto que merece la pena visitar si se va a Toledo.
Los sábados por la tarde es gratuito.
Dentro encontraremos parte de la historia judía, por lo que nos permite conocer un poco mas y de manera didáctica sobre la cultura judía.