Dónde vamos Eva
Patrimonio de la Humanidad desde 1998
Que lugares tan encantadores son los beatarios flamencos, y que gran descubrimiento en nuestra ruta por Bélgica. Personalmente me quedo con todos y cada uno de los que he visitado, pero tengo que reconocer que el Beatario de San Alejo en la desconocida y grata ciudad de Dendermonde me ha robado un poquito el alma ;-). Flandes cuenta con 16 beatarios catalogados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, de los cuales he visitado seis.
Hemos accedido a él a través de un pequeño callejón en el que si no te fijas bien, lo pasa por alto. Gracias a ello el lugar se presenta como un rincón secreto, apacible, casi onírico.
El Beatario de Dendermonde se distribuye en una especie de patio central donde se situa su iglesia y una encantadora gruta artifical, y alrededor las filas de encanadores casas blancas y rojas. Además cuenta con un increíble y amplio museo, de varias plantas que si te descuidas te absorbe varias horas!.
Que paz y tranquila se respira en estos lugares, donde la historia nos cuenta la vida de beatas retiradas del mundanal ruido en una pequeña ciudad, dentro de la ciudad. Me ha encantado la filosofía de estos lugares sobre todo porque muchos de ellos sólo vivían mujeres en plena libertad. Ahora conviven religiosas, artesanos y gente de bien, pero eso no le resta encanto y reposo.
De esos lugares que confirman mi estilo slowtravel ya que aquí, las prisas se quedan al otro lado de la puerta. Ojo, el beatario es un recinto que cierra su acceso público hacia las 19:00. Hay que estar atentos porque aquí el tiempo se detiene y tu alma solo te pide quedarte y disfrutar de tanta belleza ;-).
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