Sopeira

Me encanta viajar en coche, ocurre que cuando viajo sin prisas, a mi ritmo, sin rutas predeterminadas, descubro lugares insospechados que esconden toda su belleza para el viajero que se atreve a pasar por allí y pararse.

De camino a mi escapada al Valle d'Aran, mientras conducía plácidamente, no pode evitar fijarme en este bello enclave que de golpe me enamoró, por su sencillez, por su extraordinaria belleza, pero sobre todo por su humildad en medio del increíble paisaje de la Ribagorza oscense.

Por eso, decidimos hacer una parada, ya que no teniamos prisa y visitar este pueblecito, donde sobresale la joya románica del Monasterio de Alaón (S. XI).

Pueblo precioso
tiene su puente romano con el monasterio y el lago impresionante unas vistas preciosas aconsejo su fiesta popular el tomate, empieza el día 17 de agosto a las 16:00 de la tarde y termina a las 7:00.
con sus puestos de productos dela comarca y animación tanto para niños y adultos.

Fue un espectáculo ver las nubes reflejadas en el embalse, muy bonito, espectacular y un sitio muy tranquilo

Un paisaje montañoso en la falda de la Sierra Sis, donde se eleva un monasterio muy emblemático del románico Ourense ya que aparece en libros del S.IX