Estuvimos cenando algo un martes y fue...
Estuvimos cenando algo un martes y fue de lo mas agradable. Es una taberna pequeña y suele estar bastante llena por lo que en fin semana es recomendable ir con tiempo. En verano tienen terraza y es recomendable reservar porque se llena por completo.
Las raciones no son muy grandes pero la ventaja de platos pequeños es que permite probar mas cosas :). Todo es excelente.
A la hora de los postres, la tarta "de la leche" está riquísima! No sabíamos que nos íbamos encontrar y fue una gran sorpresa.