Taberna Gurugú de la Plazuela

Gurugú de la Plazuela es una taberna situada en pleno barrio Medieval de Sigúenza en una antigua casa de construcción típica del siglo XV.

Os muestro un rincón rico rico! Pero por muchos motivos: Por el lugar donde se encuentra, el pueblo medieval por excelencia, Sigüenza, por sus platos (especializados en setas), por su enclave (justo en frente de la Plazuela de la Cárcel) y por sus más de cuatro siglos de historia.

Es un lugar sin duda que os recomiendo cuando vengáis a visitar este bello pueblo ¿Porqué?.

Os cuento, os gustan las setas?, porque en este lugar tienen una variedad de más de 16 clases de setas donde elegir.

Un sitio muy agradable; setas, comida medieval curiosa, con alimentos de antes del descubrimiento. Y no os marchéis sin probar la limonada.

Un restaurante pequeño pero para repetir, además dejan llevar mascotas.
Los dueños muy simpáticos y amables. La cocina muy medieval.

Estuvimos este fin de semana visitando Sigüenza, y entre los sitios obligatorios de visita, yo recomendaría esta taberna. El ambiente es acogedor, los dueños son majisímos, y la comida es riquísima. Para cambiar un poco y aprovechando que nos encanta comer setas y probar sabores nuevos, pedimos unas migas con setas que quitaban el hipo, una cata de setas con la que tienes la posibilidad de probar distintas variedades de ellas, Tapas dedicadas al medievo, muy especiadas y ricas.... Bueno que todo nos gustó mucho y a buen precio. Recomiendo hacer una paradita en esta taberna, nosotros volveremos.

Este es un pequeño rincón de Sigúenza, amable y casero, especializado en todo tipo de platos a bese de setas de la zona, y con raciones muy variadas de otra cosas muy de la tierra pero elaboradas con mucha creatividad, igual que sus postres.

Siempre que voy a Sigúenza, e incluso voy a drede a ello, no puedo evitar ir a comer a este entrañable restaurante, donde el trato es superamable y las raciones de revuelto de morcilla, croquetas variadas, caramelos de perdiz, croquetitas de liebre y sus postres me alegran el día.

No puedes irte de Sigüenza sin tapear en este bar pero ve pronto porque sí no no encontrarás mesas fuera

LLevados por las recomendaciones de algunos viajeros entramos en esta taberna a comer, gran decepcion, una ensada de pimientos DE BOTE, con lo poco que cuesta asarlos por dios, que estaban mas que ACIDOS, pero bueno el ambiente positivo de la comida nos hizo no decir nada, el revuelto de morcilla, muy normal PERO RECALENTADO AL MICROHONDAS.. :(.., en fin poco mas que decir pero aunque ademas el precio nos parecio bastante desorbitado..., creo que que en un local tan pequeño es muy facil hacer las cosas mucho mejor y mas cuando en establecimientos de la localidad la experiencia fue mucho mas agradeble