La playa de la diversión.
El Boatyard es sin duda la playa más bonita de Barbados y también la más divertida, por todas las actividades que podemos hacer, la música que ambienta el gran local que organiza todo, y más que nada por la belleza del entorno.
Suele venderse la visita en las actividades de los cruceros, pero también puede irse de forma autónoma o seguir el consejo de los taxis que la proponen como opción al terminar una excursión concertada con ellos.
La oferta no está mal: transporte hasta el barco o al centro de la capital, un cóctel con o sin alcohol, una hamaca y una sombrilla. Aparte uso libre de duchas, servicios y casetas para cambiarnos, juguetes marinos, soga y trampolín para saltar al mar y un maravilloooooso wifi para subir las fotos y vídeos de nuestra diversión a las redes sociales o simplemente enviarlos a nuestros familiares y amigos.