La torre de Londres está situada en ...
La torre de Londres está situada en Tower Hill, en la zona este de la capital inglesa, a orillas del río Támesis.
Este espectacular monumento (en realidad no es simplemente una torre sino un castillo medieval), resume perfectamente la historia de Londres e Inglaterra y por eso es Patrimonio Mundial de la UNESCO. Os recomiendo que no os vayáis de la ciudad sin haberlo visto. Cada año la visitan más de 2 millones de personas.
Aquí podréis ver las joyas de la corona (incluida la corona original de la reina Isabel II y todas las coronas de los reyes ingleses), los famosos cuervos de la torre, los restos de la ciudad romana, la residencia de los reyes, el lugar donde estuvo recluido Tomás Moro, las zonas de tortura… y unas vistas espectaculares del río y el Tower Bridge de fondo.
El precio es abusivo (17 libras para adultos, 9,50 para menores de 16 años, estudiantes y jubilados 14, 50) pero es unas de las atracciones más completas de Londres y es bastante grande. Hay descuentos si las compráis por internet.
Si vais por libre os recomiendo alquilar una audioguía (4 libras) para que os podáis enterar en profundidad de la historia de esta apasionante construcción, aunque también hay explicaciones gratuitas en inglés por parte de los alabarderos de la Casa Real.
Metro Tower Hill.
Cerca de la torre de Londres que hoy conocemos hay unas pequeñas excavaciones donde se pueden ver restos de una de las zoonas más antiguas de la construcción, de la que hoy apenas quedan vestigios.
Se encuentran a la salida del metro de Tower Hill, desde donde se tienen unas magníficas vistas de la torre.
La torre de Londres es uno de los monumentos más impresionantes y con más historia de la capital británica.
Si os decidís a visitarla os recominendo que prestéis atención a estos enclaves especialmente interesantes: Bell Tower (donde está la campana y estuvo recluido el pensador Tomas Moro), Traitor´s Gate (puerta de los traidores, por la que entraban los prisioneros), St Thomas´s Tower (donde se puede visitar una reconstrucción de la habitación de Eduardo I), la exposición “Tortura en la torre”, la White Tower (normanda), los famosos cuervos de la torre, la Queen´s House (donde vivió Ana Bolena), el cadalso (donde se decapitaron varias personas en la época Tudor, entre ellas Ana Bolena o Catalina de Aragón) o las impresionantes joyas de la Corona (incluida la auténtica corona de Isabel II).


