Al Buscaglione

Recientemente renovado, esta sencilla trattoria en una de las calles cercana a la catedral es una combinación de calidad y simpatía. Los jóvenes propietarios han elegido el tema de la música vintage para decorar el lugar, que tiene pocas pero cómodas mesas en dos salones perfectos para un almuerzo con amigos. Es imprescindible reservar porque el lugar se llena rápidamente. La carta ofrece pocos platos pero deliciosos: sólo hay un par de entrantes y numerosos sándwiches y aperitivos. También es interesante la propuesta de al menos un par de platos vegetarianos y veganos. Un lugar agradable.