Animales salvajes no tan salvajes
Se trata de una reserva privada situada al norte de Sudáfrica y en el límite con el Parque Nacional de Kruger, que fue nuestra siguiente parada.
Lo descubrimos gracias a los consejos de uno de los relatos de viaje que leí durante los preparativos.
Fue un excelente calentamiento antes de entrar en Kruger. Pasamos aproximadamente 24 horas, durmiendo allí en unas tiendas de campaña grandes y muy bien preparadas en plena naturaleza. Al despertar y abrir la puerta, una jirafa enorme nos pasó por delante, como dándonos los buenos días.
En este tipo de reservas los animales no son tan salvajes, lo cual, aunque parezca menos excitante a priori, te permite tener un contacto muy cercano (literalmente) con leones, chitas, elefantes, rinocerontes. Los dueños son una familia encantadora y te acompañan ellos mismos en los recorridos, ya sean en 4x4 o a pie.