Hermosa y trágica historia...
Se encuentran en el Monasterio de Alcobaça (Alcobaça-Portugal) Dentro de la iglesia de Santa María que data del siglo Xlll y tiene planta de cruz latina. Una nave amplia y de una pureza de líneas inigualable. En los transeptos se sitúan las tumbas del rey Pedro y de la reina Inés de Castro. Unas verdaderas joyas del gótico flamígero.
La historia de estos reyes es trágica y bella al mismo tiempo. Y me impresionó en cuanto la conocí. Os la cuento: Dom Pedro se enamoró de la dama de honor de su esposa Constanza de Castilla. El padre de Dom Pedro, el rey Alfonso lV, desterró a Inés ya que no aprobaba la relación. Al morir Constanza los amantes se casaron en secreto y tuvieron varios hijos. El rey Alfonso lV en ausencia de Dom Pedro permitió que asesinaran a Inés. Enfurecido al enterarse de la tragedia Dom Pedro desató una guerra civil contra su padre y tuvo que negociar con él la paz. Al poco murió el rey y Dom Pedro comenzó su venganza contra los asesinos de su amada matándolos después de torturarlos cruelmente. A Inés le construyó una tumba (esta del Monasterio de Alcobaça-Iglesia de Santa María que os recomiendo que visitéis) e hizo exhumar su cuerpo que se encontraba en el Monasterio de Santa Clara a Velha (Coimbra-Portugal). La vistió con las mejores galas reales, le colocó la corona real y la sentó en el trono. Pedro ya rey, obligó a la corte y a las personalidades más influyentes del reino a besar la mano a la "reina". Sin duda su amor era profundo.
