Un pueblo con sabor
Uchiko es un pueblo pequeño que conserva un antiguo teatro de kabuki, construido en 1916 para celebrar la subida al trono del emperador Taisho. Poco después el teatro fue convertido en una sala de cine para, después, en los años 70, recuperarse como teatro de kabuki, empleo para el que está destinado ahora. Se puede visitar el escenario, la parte del público así como bajar a los subterráneos y observar los entresijos del teatro.
Este pequeño pueblo conserva muy bien el sabor antiguo de Japón con sus traidicionales casas de madera. Era un pueblo principalmente de comerciantes y artistas. Por eso, se pueden visitar algunas casas antiguas que pertenecías a comerciantes de clase media-alta.
En la parte final de este barrio hay una enorme mansión, antigua residencia de la familia Kami-Haga que se enriqueció gracias a la fabricación de cera y el diseño de velas. Esta casona conserva la estructura original en madera y dentro hay un museo de cera, en el que no sólo se explica un poco el proceso de fabricación de las velas y se presentan instrumentos relacionados, sino que también hay algunas figuras de cera que reproducen escenas de la época


