Ideal para conocer el Valle de Leitza
Tenía razón, mucha razón, la gente que me hablaba tan bien de esta vía verde. Gente a la que le gusta andar el bici, gente que disfruta paseando o practicando senderismo entre paisajes de montaña tan característicos de Euskadi y de Navarra, no estaban equivocados, doy fe de ello.
La vía Verde del Plazaola es un vía que se ha habilitado aprovechando el recorrido que realizaba antes el primer tren de vía estrecha que unió San Sebastián con Pamplona, denominado "El Plazaola", lo que fue todo un hito para la construcción de aquella época, ya que se tuvieron que construir numerosos túneles debido a la complicada orografía que presentan las tierras guipuzcoanas y esta parte del Norte de Navarra. Cuando cayo en desuso, se ha hecho un gran esfuerzo por recuperar y revitalizar dicho camino, y ahí ha surgido esta vía verde, que actualmente tiene habilitados unos 44 kilómetros, comprendidos entre Andoain (Gipuzkoa) y Lekunberri (Navarra).
De todas formas, entiendo que a alguien le dé algo de "yu-yu" adentrarse en estos túneles largos y sombríos, es una sensación extraña, curiosa, parece que retrocedes al pasado y revives la época del tren del Plazaola. Para los más precavidos, una linterna puede ser una buena idea, sobre todo para los primeros pasos dentro del túnel. En invierno es típico que haya mucha humedad dentro de los túneles, de hecho, en más de uno es más que probable encontrar hielo en la paredes y en el suelo, o también alguna que otra pequeña cascada que proviene del techo o de alguna pared lateral.
Hay que destacar las panorámicas que se obtienen de la localidad de Leitza tras pasar uno de los túneles más largos, de más de 600 metros, asomándose sobre la valla de madera, las vistas sobre la magnífica iglesia de la localidad, casco histórico y el valle de Leitza en general son espectaculares. A partir de aquí y hasta el túnel de Uitzi comienza una zona mucho más abierta y verde, en la que pega el sol y en la que el camino muestra su cara más amable, con mucho contraste de colores entre campas, bosques, musgo, árboles y cielo, una maravilla para cualquier época del año; eso sí, otoño y primavera se llevan la palma, muy recomendable caminar por la vía en estas épocas, ideal para ir con niños, a los que el plan aventurero de las luces en los túneles les gustará seguro.
Como veis, es un poco "aventurilla" esta vía verde, sobre todo en invierno, pero no deja de tener su gracia, ya que no muchas vías verdes tienen estas características tan peculiares, sobre todo el tema de tener que pasar por unos túneles que tú mismo tienes que iluminar. Eso y el bello paisaje que acompaña a este camino que protege a Leitza, le confieren ese carácter tan natural y salvaje que tiene, lo que como decía, evoca y te hace viajar a épocas pasadas en las que el tren del Plazaola surcaba estos montañosos valles en busca de la llanada navarra.
Recomendación gastronómica de la jornada: Hayas quemado suficientes calorías caminando por esta vía verde o no, no olvides ir a comer al Restaurante Landa de Leitza, gran sitio, con un buen menú de fin de semana en el que sirven cantidades industriales de comida.


