Sin poder respirar en el Volcán Masaya
Antes de ir, te recomiendo que lleves una mascarilla por si acaso. Sobre todo, si eres asmático como yo.
Es uno de los volcanes activos de Nicaragua más fáciles de acceder, puedes ir en coche hasta la boca del cráter.
Fuimos al atardecer, con la intención de ver la lava al rojo vivo cuando se hiciera de noche, pero aquella tarde el volcán no paraba de emitir azufre, lo cual me dificultó bastante el disfrutar 100% de este impresionante lugar, ya que era incapaz de respirar, sentía que me ahogaba, que se me quemaban los pulmones. Nunca he sentido esa sensación tan mala. Pagamos 30 dólares cada uno a nuestro guía que contratamos desde Granada, de modo que si tengo que poner alguna pega, sería que no nos facilitaron ninguna mascarilla, o como mínimo, avisar que lleváramos algo para no pasar ese mal trago.
Vimos un precioso atardecer, y luego nos llevaron a unas cuevas que están en el mismo volcán donde presenciamos a miles de murciélagos y alguna serpiente.
Finalmente, cuando anocheció, nos asomamos al cráter, pero fue imposible ver la lava. El humo del azufre obstaculizaba toda nuestra visión, así que otra vez será.
En resumen, es un volcán muy recomendable por su fácil acceso y el impresionante paisaje que se puede contemplar desde allí, pero me parece imprescindible avisar a los visitantes que lleven una mascarilla por precaución.


