Alcalá del Júcar

Alcalá del Júcar es un municipio albaceteño considerado como uno de los pueblos con más encanto de Castilla-La Mancha. Gran parte de este atributo se debe a que su Patrimonio Histórico-Artístico está declarado Bien de Interés Cultural por el gran valor y la buena conservación de sus edificaciones. Si eres uno de los viajeros que planea recorrer el Camino de Santiago, te encantará visitar Alcalá del Júcar ya que, en él, se encuentra la Ruta Camino de Santiago de la Lana, una ruta muy frecuentada por los caminantes que quieren llegar a pie hasta Santiago de Compostela.

Alcalá del Júcar destaca no sólo por su belleza natural, sino por su riqueza cultural. Si estás planeando uno de tus viajes a Alcalá del Júcar, vivirás la belleza del paisaje de la localidad enclavada entre cerros en los que se forma la famosa hoz del río Júcar. Para disfrutar de una experiencia turística activa, debes conocer Alcalá del Júcar a través de su entorno natural para descubrir cosas tan fascinantes como las cuevas naturales de Garadén, de 750 años de antigüedad, o la Cueva del Diablo, ambas antiguos puntos aduaneros del pueblo.

Viajar a Alcalá del Júcar también es vivir emociones fuertes porque podrás practicar rápel o descender el río en piragua, además de hacer puenting a 20 metros de altura. Si prefieres un tranquilo paseo por su casco antiguo, vivirás el encanto de sus calles escarpadas que te llevarán hasta el Castillo de Alcalá del Júcar, de construcción almohade en los siglos XII y XIII y desde el que hay espectaculares vistas panorámicas del paisaje. Uno de los atractivos que adornan el paisaje y que uno ve cuando hace turismo en Alcalá de Júcar es el puente romano sobre el río que da acceso a la Iglesia de San Andrés, y en cuyo lado opuesto se sitúa una plaza de toros única por su peculiar forma y situación.