El Barco de Ávila

Visitar El Barco de Ávila es deleitarse con las bellas panorámicas que ofrece la localidad de la sierra de Gredos. Declarado Conjunto Histórico-Artístico y situado en el valle del Tormes, cuenta con un abundante patrimonio que mantiene elementos urbanos y rincones característicos de gran interés. Algunos ejemplares son el Castillo de Valdecorneja o la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Parte del turismo en El Barco de Ávila se dirige a senderistas y excursionistas que encuentran en el Parque Natural de la Sierra de Gredos un lugar ideal para sus aficiones.

Conocer El Barco de Ávila es callejear hasta llegar a sus principales atractivos monumentales, como es el popularmente conocido como “Puente Viejo”, de origen romano y cuya fecha de construcción no está muy clara. El Castillo de El Barco de Ávila, que reina sobre el río y el puente, se sitúa en el punto más elevado del valle y su origen se encuentra en el siglo X. Viajar a El Barco de Ávila supone visitar el gran patrimonio de la población, que se encuentra en el casco histórico donde conviven iglesias, ermitas y casas señoriales. También encontramos los fragmentos de la muralla, la Puerta de Ávila, que antiguamente protegía la localidad de las invasiones.

Los viajes a El Barco de Ávila pueden dirigirse tanto a callejear y admirar los diferentes puntos de interés histórico como para relajarse y desconectar recorriendo las rutas que fluyen por el Parque Natural de la Sierra de Gredos.

Las fiestas populares de Santiago o de los Quintos, San Pedro del Barco y el Santísimo Cristo del Caño atraen la atención de la región cada año, llenándose el municipio de visitante de distintos puntos cercanos al municipio.