Nápoles, capital de la región de Campania, es la ciudad más grande del Sur de Italia. Está situada en el bello golfo de Nápoles, a pocos kilómetros de la hermosa Costa Amalfitana, declarada Patrimonio de la Humanada, lo que fomenta el turismo en Nápoles. En la propia bahía se encuentra el famoso Monte Vesubio, un imponente volcán de más de mil metros de altura, de lo más activos del país. La ciudad posee una gran riqueza histórica, artística, cultural y gastronómica, lo que llevó a la UNESCO a declarar su centro histórico Patrimonio de la Humanidad.
Si quieres viajar a Nápoles, podrás disfrutar de una ciudad llena de color, de gente alegre, de sus pizzas y de sus calles escarpadas. Al visitar Nápoles pasarás por la Piazza del Plebescito, símbolo de la ciudad, donde se encuentran las principales edificaciones de la ciudad como el Palacio Real, la Basílica de San Francisco de Paula, icono de la ciudad por su majestuosa arquitectura circular y columnas imperiales. Otros lugares importantes son el Castel dell’Ovo, o la Galleria Umberto I, repleto de tiendas. En tus viajes a Nápoles podrás disfrutar además del Museo Arqueológico Nacional, considerado uno de los más importantes de su género en Europa, tanto por la calidad como por la cantidad de obras que expone.
Para conocer Nápoles debes adentrarte en la Nápoles subterránea, un complejo de catatumbas y galerías que se encuentran bajo la ciudad. En la antigüedad era una verdadera ciudad subterránea. En la época romana, muchos cristianos perseguidos se refugiaban en estas catacumbas. Ese fue el caso del santo mártir San Gennaro.
Nápoles es una ciudad muy visitada, no sólo por derecho propio, sino también como punto de partida hacia otros destinos cercanos como Pompeya, el Palacio Real de Casertam las islas de Capri e Ischia o la Costa Amalfitana. También es posible hacer excursiones al Monte Vesubio.