La ciudad de Florencia, capital de La Toscana, está situada en el centro del país, rodeada de colinas arcillosas. Se la conoce como la “Ciudad del Arte,” una metrópoli cultural que ofrece los mejores museos y galerías de arte. Fundada por los romanos en el 59 a.C. y cuna del movimiento artístico y arquitectónico Renacentista, es dueña de un conjunto monumental increíble, por lo que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad. Es tierra natal de grandes nombres como Dante Alighieri y Leonardo Da Vinci.
Al viajar a Florencia descubrirás que esta ciudad es un museo en vivo. Los mármoles coloridos de sus iglesias y obras arquitectónicas, así como el papel desempeñado por la ciudad en el desarrollo de la cultura y del arte renacentista y medieval, han llenado su centro histórico de obras maestras. Para conocer Florencia debes ir a la Piazza della Signoria, corazón de la ciudad, donde encontramos el Palazzo Vecchio, centro administrativo de la ciudad desde la época medieval, y también visitar el Ponte Vecchio, uno de los más famosos del mundo.
En tus viajes a Florencia también podrás disfrutar de la Galería de los Uffizi, uno de los museos más importantes de Italia. Tampoco te olvides de pasar por la Piazza del Duomo, presidida por la famosísima Basílica de Santa Maria del Fiore, catedral de Florencia cuya cúpula es una obra maestra renacentista proyectada por Filippo Brunelleschi. El conjunto monumental que se completa con el Campanile de Giotto y el Baptisterio de San Juan, lo han convertido en Patrimonio de la Humanidad.
Se puede hacer turismo en Florencia durante todo el año. La gran variedad de actividades que ofrece esta ciudad, como visitar museos, tiendas de moda y, por supuesto, disfrutar de la auténtica cocina italiana, la convierten en uno de los destinos más polivalentes de Europa. La mejor manera de visitar Florencia es con un recorrido por el centro de la ciudad, donde las obras pictóricas y la arquitectura urbanística se sincronizan a la perfección con el estilo renacentista.